NUESTRA HISTORIA

¡Una victoria más…!

“A la patria no solo se le defiende con las armas, también con el estudio”

Así lo comprendieron los preclaros hombres de nuestra revolución. El pensamiento se hizo realidad cuando el Gral. de División Lázaro Cárdenas del Río ordeno la fundación de las escuelas “Hijos del Ejército” para atender la familia del militar, algunas de estas escuelas empezaron a funcionar en 1935 albergando en su seno a los hijos de los soldados, que en ellas hallaron techo, alimento, educación y sobre todo comprensión y calor de hogar, de lo que casi todos carecían.

Nuestra institución tiene sus orígenes en noviembre de 1941 con el nombre de escuela Industrial Militar no. 16 “Hijos del Ejercito”, fue hasta el 2 de diciembre de 1942 que las escuelas “Hijos del Ejército” pasaron a depender de la Secretaría de Educación Pública y al cambiar de secretaria también se cambiaron los nombres, tocando a la nuestra la de Internado de Enseñanza Primaria no. 16 y el nombre de un patriota poblano “Julián Hinojosa”.

Fue remodelado en 1962 por indicaciones del presidente de la Republica Adolfo López Mateos para dar mejor atención a la población infantil más desprotegida quedando la estructura del edificio actual y conservando su carácter asistencial y educativo de manera gratuita, a cargo de la secretaria de educación pública y del gobierno federal.

En la actualidad el internado sigue conservado su esencia, la de proporcionar a los niños y niñas un servicio asistencial que consiste en alimentación, hospedaje, servicio médico, dental y orientación psicológica, entre los más relevantes y un servicio educativo que a través del aula de clase, los talleres de adiestramiento, las aulas de inglés, habilidad digital, y de lectura, los alumnos desarrollan su autonomía, pensamiento crítico, fortalecen los valores de convivencia y trabajo en equipo. Atiende a 296 alumnos entre niños y niñas de seis a doce años de edad.

Serian incontables las historias de los grande hombres y mujeres profesionistas que con mucho orgullo han regresado a visitar la que un día fue su escuela y su casa. entre ellos hay arquitectos, escritores, doctores, maestros, abogados, pero sobre todo hombres y mujeres de bien y útiles a su patria.

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